Dora solía decir que las piedras están ahí para tropezar con ellas, no para hacernos cambiar de camino. A mí me gusta la gente que enseña sus heridas, que no oculta sus errores, que se presta a contarte su historia sin maquillarla. Auténtica en sus formas. Ese tipo de gente que no decide por ti, que no te advierte sobre sus fracasos, sino que se presenta y antes de darte un beso te dice: <>.
By Elvira Sastre !
No hay comentarios.:
Publicar un comentario