Remó hasta la mitad del río, donde el resplandor naranja comenzaba a extenderse por el agua. Entonces dejo de remar, haciendo sólo los movimientos necesarios para mantenerse en el mismo sitio, y miró fijamente el cielo hasta que la luz despuntó entre los árboles, Le gustaba detenerse en el momento exacto del amanecer: la vista era espectacular, como si el mundo volviera a nacer.
The notebook !
No hay comentarios.:
Publicar un comentario